

Las 8 Leyes de la Salud
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Confianza en Dios
Confianza en Dios
Uno de los remedios naturales más importantes es la confianza en Dios. Muchas personas tienen fe en los médicos o en los fármacos, pero nuestra confianza debe estar puesta en el Creador; Él nos conoce y sabe exactamente qué es lo mejor para nuestra vida. Jesús dijo: “Si puedes creer, al que cree todo le es posible” (Mar. 9:23).
“La verdadera epidemia en nuestra cultura no son sólo las enfermedades del corazón, sino..las enfermedades espirituales del corazón; es decir, los profundos sentimientos de soledad, aislamiento, alienación y la depresión que son prevalentes en nuestra cultura con la división de las estructuras que se utilizaban para proporcionarnos un sentido de conexión y comunidad”. Las estructuras sociales que históricamente nos conectan con Dios y la comunidad son la iglesia y la familia, ambos presentados en el Génesis.
A continuación, señalamos algunos beneficios que obtienen aquellos que confían en Dios y se reúnen con otros a través de la asistencia regular a la iglesia, , según el Dr. Dean Ornish famoso cardiólogo,:
-Menores índices de muerte que los que no asisten a la iglesia, a pesar de todos los factores de riesgo.
-Menos síntomas y mejores resultados de salud en siete de cada ocho estudios de cáncer, cuatro de cada cinco estudios sobre hipertensión arterial, cuatro de cada seis estudios de enfermedades del corazón y cuatro de cada cinco estudios de salud en general.
-Menor tendencia a la depresión, suicidio, alcoholismo y otras adicciones.
-Un 53% de recuperación más rápido de la depresión.
-Tres veces más probabilidades de sobrevivir una cirugía de corazón abierto.
-La estancia hospitalaria es dos veces más corta que la de los pacientes mayores sin ninguna afiliación religiosa.
-Un funcionamiento más fuerte del sistema inmunológico.
Por otro lado, vivir sin fe en Dios puede causar también un impacto negativo en la salud. Por dos años, 444 pacientes mayores de edad fueron observados después de su salida del hospital. Cuando los entrevistaron, aquellos quienes se preguntaban “si Dios los había abandonado” o “si Él los amaba” tuvieron un aumento del 20% a 30% de mortalidad prematura comparada con aquellos quienes confiaron plenamente en el amor de Dios.
Tan convincente es la evidencia de la fe, que incluso las revistas médicas de prestigio, como los Archivos de Medicina Interna, han desarrollado cuestionarios espirituales para evaluar el nivel de la fe en Dios en un paciente. La ciencia, en efecto, ha reconocido lo que cada persona de fe ha sabido intuitivamente desde hace siglos: la confianza en Dios es muy benéfica para su salud.
Los estudios indican que las iglesias que tienen una alta estima por los principios bíblicos de la salud encontrados en el Antiguo y Nuevo Testamentos se desempeñan mejor en estas áreas. Con razón la biblia dice: “Hijo mío no te olvides de mi ley y tu corazón guarde mis mandamientos; por que largura de días y años de vida y paz te aumentarán” (Prov. 3:1,2).